viernes, diciembre 30, 2011

De oferta y demanda de trabajo, relaciones laborales, y si un vaso lleno puede volver a llenarse... sin antes vaciarse.



“Reforma del mercado de trabajo” es frase y genérico concepto para tod@s tremendamente familiar a fuerza de repetición mediática. Así, la idea vaga de la Reforma como instrumento o palanca para la recuperación del empleo, etcétera y más, aparece remedio ineludible. De Fierabrás el bálsamo.

Como sucede con tantos otros, el tal remedio, es verdad a medias.

Tienen las verdades a medias aquella condición engañosa que al decir clásico, son la peor de las mentiras. Porque claro, pretenden el objetivo de convencer, pues son verdad, pero para ello, analistas diversos y técnicos también, elucubran y concluyen, y convencen, omitiendo.

Omitir, se sabe, puede obedecer a ignorancia, olvido o mala fe. Y este sería otro asunto, en el cual de la primera variable no hay poco y de la tercera en exceso. En opinión mía.

Una aproximación somera a la trascendencia e importancia dada al asunto: Reforma del mercado de trabajo, pasa por imaginar que conforme más fácil y, especialmente, barato resulte disponer del trabajo humano necesario en cada momento por cada unidad productiva o empresa, con mayor ánimo y espíritu emprendedor van a funcionar aquellas demandantes de trabajo (empresas o unidades productivas) y muchas mas probabilidades tiene la oferta humana para encontrar algún quien le alquile sus habilidades.

Las omisiones son ahí de bulto, y por eso opino que muchos quienes opinan, y difunden, tienen poca vergüenza o menos y, en su caso, más ignorancia o plus.

De seguido me ocuparé de mencionar algunas verdades, completas, incontrovertibles y, reitero especialmente, contrastables.

-Yo me ocuparé de reseñar, y a vosotr@s os invito a la reflexión-

Una. El trabajo humano es sustituible, y de hecho se sustituye, con tecnología. Y no es de ahora.

Dos. Las unidades productivas demanda trabajo humano solo cuando lo requieren para sus fines y siempre y cuando sus fines tengan sentido, bien por demanda agregada, bien por no disminución de la existente.

Tres. La economía productiva hace tiempo está deslocalizada del barrio del Planeta que mayor capacidad de demanda ha venido teniendo. O los emergentes convertidos en el polígono industrial del mundo mundial, grande, pero finito, y los ricos desarrollados consumiendo como locos.

Cuatro. Ja!... -me perdonarán la expresión, pero esta variable me parece cada día más, entre enorme ingenuidad y majadería absoluta-... La cosa vista desde la óptica nacional. O cómo quieren incidir, cuando vivimos mundializados y globalizados, en la idea de que aquello que vemos desde lo alto del campanario de la plaza del pueblo -cada cual elija el suyo- comprendo todo aquello que es, ya no visible, sino el mundo mismo... España, mi querida España, esta España nuestra -memoria por Cecilia- y Francia e Italia y Portugal y el Reino Unido de allí y... vienen navegando por este torrente de reformas desde hace ya algunas décadas, y en él siguen y seguirán -según pienso- Porque si agregamos a la verdad que describo Una a la que describo Dos y a la que describo Tres, tenemos esta Cuatro que también podría llamarse como de necesidad de equilibrio o, quizá más acertado, como de ¿qué hacemos con los excedentes?... -Reconozco ahora que desconozco si esto de sustantivar con interrogante está dentro de convención. Aunque, igual, escrito quedó-
Quinta. La demanda (el consumo) está influenciada por la renta disponible, por la necesidad básica del bien y la disponibilidad del mismo. Así, nadie consumo -salvo raras excepciones- aquello que no puede adquirir, ni aquello de lo cual está satisfecho, ni aquello de lo cual no hay. Y, paradojas, que en realidad son efectos de otros temas, la renta media disponible desciende desde hace rato -recuerdo ahora: We are the 99%, de Occupy Wall Street- y el crédito fácil se acabó y cuando casi no llega para pagar aquello que se debe está poco claro como comprar más...

Sexta. La Organización Mundial del Trabajo aporta estudios (disponibles en Internet) que calculan el desempleo mundial entorno a 230 millones de personas, y creciendo, de las cuales aproximadamente el 40% son ciudadanas de los países desarrollados. Si tomamos como países desarrollados a los que forman parte del club: OCDE, tenemos que 92 millones, aproximados, de personas, de un total de 1.232 millones que parece vivimos dentro de esa selecta asociación, no tienen empleo... -Nótese lo diferente que resulta decir: excedentes, en lugar de: sin empleo-


Bueno, dije que yo apuntaba y, si os parece de interés, vosotr@s concluiríais. Y no sigo.

Bueno, disculpen, sí, sigo... Sigo diciendo que el nuevo Gobierno, del PP por alternancia en devaluada democracia, que ganó elecciones después de ardua campaña opositora “a cara de perro” -disculpen la expresión para simplificar y que, como saben, es usada con frecuencia en entornos de negociació. No se vaya a ofender nadie- Decía que con cariz enfadado gano el PP, con apoyo de comunicadores y aprendices o postulantes adláteres que en su inmensa mayoría llevan en las cosas del análisis socieconómico una legislatura, y ya dictaminan cual doctor Nobel. Pero, aparte la cara, con medias verdades, ganó. Y el desempleo, o los excedentes no demandados, me parece serán, y no es vaticinio, aunque también, pero por conclusión, la mayor evidencia de que no dicen, ni dijeron, la verdad. Completa.


la imagen en: saturnoags.com

2 comentarios:

Corpi dijo...

Cuanto menos ganemos por nuestro trabajo menos podremos comprar; por tanto cuanto menos consumamos menos trabajadores harán falta, lo que provocará un aumento del desempleo y un menos consumo que conllevará que más gente vaya al paro, que tendrá como consecuencia que no puedan comprar menos, y eso conlleva...
Total, que plantaremos una huerta y comeremos de lo produzcamos, como hacían nuestros abuelos.
Ah, bueno, el que no tenga tierra... no tendrá ni siquiera un lugar donde lo puedan enterrar.
Tiempos oscuros se acercan.
Un saludo y buen año.

benito_reyes_vega dijo...

Abrazo, Corpi... Por lo demás, sí, tendencia.